Puntos Sobresalientes de Levítico 25, 26, 27

Puntos sobresalientes de la Biblia: Levítico 25, 26, 27

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Puntos sobresalientes del libro de Levítico 25 a 27


Respuestas a preguntas bíblicas:

25:35-37. ¿Estaba siempre mal que los israelitas cobraran interés? Si se prestaba el dinero por razones de negocio, el prestamista podía cobrar interés. No obstante, la Ley prohibía que se cobrara interés sobre préstamos que se hicieran para sacar a alguien de la pobreza. Era injusto aprovecharse de los reveses económicos de algún vecino necesitado (Éxodo 22:25).
26:19. ¿Cómo podrían ‘los cielos ser como hierro, y la tierra como cobre’? Por falta de lluvia, la apariencia de los cielos sobre la tierra de Canaán sería dura y compacta como el hierro. Sin lluvia, la tierra tendría un brillo metálico de color cobre.
26:26. ¿Qué significa el hecho de que ‘diez mujeres estuvieran cociendo pan en un solo horno’? Normalmente, cada mujer necesitaría su propio horno para encargarse de todo lo que tuviera que hornear. Pero estas palabras indican que habría tanta escasez de alimento que diez mujeres podrían cocer todo lo que tenían en un solo horno. Esta era una de las consecuencias predichas por no mantener la santidad.

CAPITULO 25:


w11 15/11 pág. 17 párr. 4 “Residentes temporales” en este mundo malvado
4. ¿Qué advertencia recibieron los israelitas antes de comenzar a residir en su país?
4 Con el tiempo, los descendientes de Abrahán se multiplicaron y llegaron a constituir una nación, llamada Israel, con su código de leyes y su territorio (Gén. 48:4; Deu. 6:1). Pero no debían olvidar nunca que Jehová era el verdadero Dueño del país (Lev. 25:23). Por así decirlo, eran sus inquilinos y tenían que respetar sus deseos. Además, era necesario que recordaran que “no solo de pan vive el hombre”; no podían permitir que la prosperidad los llevara a olvidarse de Jehová (Deu. 8:1-3). Antes de instalarse en su tierra, recibieron esta advertencia: “Cuando Jehová tu Dios te introduzca en la tierra que a tus antepasados Abrahán, Isaac y Jacob juró darte, ciudades grandes y de buena apariencia que tú no edificaste, y casas llenas de toda suerte de cosas buenas que no llenaste, y cisternas labradas que no labraste, viñas y olivares que no plantaste, y hayas comido y quedado satisfecho, cuídate para que no te olvides de Jehová” (Deu. 6:10-12).

w05 15/3 pág. 15 párrs. 1-2 “Comprados por precio”
1, 2. a) Según la Ley de Moisés, ¿cómo había de tratarse a los esclavos israelitas? b) ¿Qué opción tenía el esclavo que amaba a su amo?
“LA ESCLAVITUD era predominante y ampliamente aceptada en el mundo antiguo —señala el Diccionario Bíblico Conciso Holman—. Las economías de Egipto, Grecia, y Roma se basaban en la mano de obra del esclavo. En el primer siglo cristiano, una de cada tres personas en Italia y una de cada cinco en cualquier otro lugar era esclava.”
2 Aunque también existía esclavitud en el antiguo Israel, la Ley de Moisés protegía a los siervos hebreos. Por ejemplo, disponía que el período máximo de servidumbre ascendiera a seis años. Al séptimo, el esclavo israelita tenía que salir “como persona puesta en libertad sin pagar nada”. Los preceptos que regulaban el trato con los esclavos eran tan justos y humanitarios que la Ley establecía: “Si el esclavo dice insistentemente: ‘Realmente amo a mi señor, a mi esposa y a mis hijos; no quiero salir como persona puesta en libertad’, entonces su amo tiene que acercarlo al Dios verdadero y tiene que ponerlo contra la puerta o la jamba de la puerta; y su amo tiene que agujerearle la oreja con un punzón, y él tiene que ser esclavo suyo hasta tiempo indefinido” (Éxodo 21:2-6; Levítico 25:42, 43; Deuteronomio 15:12-18).

w01 1/12 pág. 22 párr. 14 Temamos a Jehová y guardemos sus mandamientos
14. ¿Cómo reflejó verdadero temor de Dios la misericordia de José?
14 Años después, José se vio cara a cara gcon sus hermanos, quienes sin piedad alguna lo habían vendido como esclavo. Pudo haber aprovechado la gran necesidad de alimento que tenían para vengarse de lo que le habían hecho. Pero el trato tiránico no refleja temor de Dios (Levítico 25:43). Por consiguiente, cuando obtuvo suficientes pruebas de que habían cambiado de actitud, fue misericordioso y los perdonó. Como en el caso de José, el temor piadoso nos impulsará a vencer el mal con el bien y nos impedirá ceder a la tentación (Génesis 45:1-11; Salmo 130:3, 4; Romanos 12:17-21).

w01 15/9 págs. 12-13 párrs. 12-13 ¿Nos alcanzarán las bendiciones de Jehová?
12, 13. a) ¿Cómo demostró Boaz profundo respeto por la ley de recompra que había dado Jehová? b) ¿Qué bendiciones divinas alcanzaron a Boaz?
12 La prueba más sobresaliente de que Boaz seguía escuchando a Jehová fue el altruismo con el que cumplió la ley de Dios sobre la recompra. Hizo todo lo que pudo para asegurarse de que la herencia de Elimélec —su pariente y el difunto esposo de Noemí— permaneciera en la familia de este. En virtud del “matrimonio de cuñado”, las viudas debían casarse con el familiar más cercano de su marido a fin de que el hijo que naciera se quedara con la herencia (Deuteronomio 25:5-10; Levítico 25:47-49). Rut se ofreció para casarse en lugar de Noemí, que ya no estaba en edad fértil. Después de que un pariente más cercano de Elimélec se negara a ayudar a Noemí, Boaz contrajo matrimonio con Rut. A su hijo Obed se le consideró prole de Noemí y heredero legal de Elimélec (Rut 2:19, 20; 4:1, 6, 9, 13-16).
13 A Boaz lo alcanzaron cuantiosas bendiciones a causa de su obediencia altruista a la ley de Dios. Mediante su hijo Obed, él y Rut tuvieron el honor de ser antepasados de Jesucristo (Rut 2:12; 4:13, 21, 22; Mateo 1:1, 5, 6). Los actos abnegados de Boaz nos enseñan que las bendiciones alcanzan a quienes tienen amor a los demás y obran en conformidad con los requisitos divinos.

CAPITULO 26:


w08 15/4 pág. 4 párrs. 7-8 Rechacemos las “cosas que nada valen”
7, 8. ¿Cómo podrían convertirse las riquezas en un dios?
7 Hoy día, en muchos países la gente aún se inclina ante imágenes hechas por el hombre, pero estos dioses son tan inútiles ahora como lo fueron en el pasado (1 Juan 5:21). Ahora bien, la Biblia habla asimismo de otro tipo de dioses. Recordemos estas palabras de Jesús: “Nadie puede servir como esclavo a dos amos; porque u odiará al uno y amará al otro, o se apegará al uno y despreciará al otro. No pueden ustedes servir como esclavos a Dios y a las Riquezas” (Mat. 6:24).
8 ¿Cómo podrían convertirse las riquezas en un dios? Pongamos una comparación. Pensemos en una piedra de buen tamaño que alguien encuentra en un campo del antiguo Israel. Esa piedra podría ser útil en la construcción de una pared o de una casa. Pero si se usara como “columna sagrada” o como “obra de exhibición” con fines idolátricos, se convertiría en un tropiezo para el pueblo de Jehová (Lev. 26:1). De igual modo, el dinero es útil hoy día. Lo necesitamos para subsistir y, además, podemos darle un buen uso en el servicio a Jehová (Ecl. 7:12; Luc. 16:9). Pero si lo ponemos por encima de las actividades cristianas, podría convertirse en nuestro dios (léase 1 Timoteo 6:9, 10). En el mundo actual, la búsqueda de riquezas ocupa un lugar primordial en la vida de la gente. Por eso debemos esforzarnos por ver el dinero de manera equilibrada (1 Tim. 6:17-19).

w08 15/4 págs. 3-4 párr. 5 Rechacemos las “cosas que nada valen”
5. ¿A qué califica la expresión “que nada valen” en la mayoría de los versículos bíblicos?
5 Cabe destacar que la expresión “que nada valen” califica a los dioses falsos en la mayoría de los versículos bíblicos en los que aparece. Veamos algunos casos. Jehová les dijo a los israelitas: “No deben hacerse dioses que nada valen, y no deben erigirse una imagen tallada ni una columna sagrada, y no deben colocar una piedra como obra de exhibición en su tierra para inclinarse hacia ella” (Lev. 26:1). Y el rey David escribió: “Jehová es grande y ha de ser alabado en gran manera, y se le ha de temer más que a todos los demás dioses. Porque todos los dioses de los pueblos son dioses que nada valen. En cuanto a Jehová, él hizo los cielos” (1 Cró. 16:25, 26).

w13 15/9 págs. 7-8 párrs. 3-4 Los recordatorios de Jehová son fidedignos ***
3, 4. a) ¿ Qué mensajes transmiten los recordatorios de Jehová? b) ¿Cómo se beneficiaban los israelitas si hacían caso?
3 A veces, los recordatorios de Jehová transmiten mensajes de advertencia. En el caso de los israelitas, los profetas les avisaban una y otra vez de lo que podía sucederles. Por ejemplo, cuando estaban a punto de entrar en la Tierra Prometida, Moisés les advirtió: “Cuídense por temor de que su corazón sea atraído seductoramente, y de veras se desvíen y adoren a otros dioses y se inclinen ante ellos, y la cólera de Jehová ciertamente se encienda contra ustedes” (Deut. 11:16, 17). En la Biblia encontramos una gran cantidad de recordatorios útiles que Jehová le dio a su pueblo.
4 En muchas otras ocasiones, Jehová exhortó a los israelitas a que le temieran, escucharan su voz y santificaran su nombre (Deut. 4:29-31; 5:28, 29). Si hacían caso, él los colmaría de bendiciones (Lev. 26:3-6; Deut. 28:1-4).

w08 15/10 págs. 13-14 párrs. 9-10 La respuesta de Jehová a una oración ferviente
9, 10. a) ¿Cuál fue el “lugar santo de habitación” de Jehová en la antigüedad? b) ¿De qué bendiciones disfrutan el resto ungido y las “otras ovejas”?
9 En la antigüedad, se hizo referencia a la Tierra Prometida como el lugar santo de habitación de Dios. Recordemos el canto de victoria que los israelitas entonaron tras su liberación de Egipto: “Tú en tu bondad amorosa has guiado al pueblo que has recobrado; tú en tu fuerza ciertamente los conducirás a tu lugar santo de habitación” (Éxo. 15:13). Posteriormente, en ese “lugar [...] de habitación” se estableció el templo, con su sacerdocio, y también una ciudad capital, Jerusalén, con una línea de reyes descendientes de David que se sentaban sobre el trono de Jehová (1 Cró. 29:23). Jesús tuvo buenas razones para llamar a Jerusalén “la ciudad del gran Rey” (Mat. 5:35).
10 ¿Qué hay de nuestros días? En el año 33 nació una nueva nación, “el Israel de Dios” (Gál. 6:16). Dicha nación, compuesta de los hermanos ungidos de Jesucristo, cumplió la tarea que el Israel carnal no logró llevar a cabo: ser testigos del nombre de Dios (Isa. 43:10; 1 Ped. 2:9). Jehová les hizo a ellos la misma promesa que había hecho al antiguo Israel: “Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo” (2 Cor. 6:16; Lev. 26:12). En 1919, Jehová entabló una relación especial con los restantes del “Israel de Dios”. En ese momento, el resto ungido tomó posesión de una “tierra”, un campo de actividad espiritual en el que disfrutan de un paraíso espiritual (Isa. 66:8). Desde los años treinta, millones de “otras ovejas” se han unido a ellos (Juan 10:16). La felicidad y la prosperidad espiritual de estos cristianos del día moderno son prueba convincente de lo bueno que es someterse a la justa soberanía de Jehová (léase Salmo 91:1, 2). Eso enfurece muchísimo a Satanás.

w01 15/12 pág. 11 párrs. 9-10 Un remedio práctico contra las tensiones de la vida
9, 10. ¿Qué simbolizaba el yugo en tiempos antiguos, y por qué invitó Jesús a la gente a tomar el yugo de él?
9 ¿Observó que en Mateo 11:28, 29 dijo Jesús: “Tomen sobre sí mi yugo y aprendan de mí”? En aquellos tiempos, el hombre común podría sentirse como si trabajara bajo un yugo. Desde la antigüedad, el yugo ha sido un símbolo de esclavitud o servidumbre (Génesis 27:40; Levítico 26:13; Deuteronomio 28:48). Muchos de los obreros que Jesús conoció acarreaban pesadas cargas con un yugo literal que, dependiendo de su forma, se llevaría con relativa comodidad sobre el cuello y los hombros o causaría irritación en la piel. Siendo Jesús carpintero, probablemente fabricó yugos y, por tanto, sabía qué forma darles para que fueran ‘suaves’. Quizá cubriera de piel o de tela las zonas de contacto con el cuerpo, a fin de que resultaran lo más cómodos posible.
10 “Tomen sobre sí mi yugo”, dijo él. Con estas palabras tal vez se comparó a sí mismo a un proveedor de yugos de buena calidad, ‘suaves’ para el cuello y los hombros de los trabajadores. De ahí que agregara: “Mi carga es ligera”. Con ello subrayó que el yugo no era incómodo ni el trabajo servil. Cierto es que al invitar a sus oyentes a aceptar su yugo, Jesús no ofreció una liberación inmediata de todas las condiciones opresivas que existían entonces, pero ver los asuntos desde la nueva perspectiva que él enseñó produciría un refrigerio considerable. Los cambios que los oyentes hicieran en su estilo de vida y en su manera de actuar también los aliviarían. Y aún más importante, una esperanza clara y firme les permitiría vivir con menos tensiones.

CAPITULO 27:


w02 15/12 pág. 30 ¿Recuerda usted?
¿Por qué no es el diezmo un requisito para los cristianos?
Bajo la Ley entregada al antiguo Israel, el diezmo servía para apoyar a la tribu de Leví y atender a los necesitados (Levítico 27:30; Deuteronomio 14:28, 29). La muerte expiatoria de Jesús abolió la Ley y, con ella, el requisito del diezmo (Efesios 2:13-15). En la congregación primitiva, la norma era que cada cristiano hiciera una donación según sus posibilidades y según hubiera resuelto en el corazón (2 Corintios 9:5, 7).—1/12, páginas 4-6.

w03 1/12 pág. 16 párr. 7 ‘Mostrémonos agradecidos’
7. ¿De qué manera daba el diezmo a los israelitas la oportunidad de demostrar su agradecimiento a Jehová?
7 En la Ley mosaica, Jehová indicó tres maneras mediante las cuales los israelitas podían demostrar agradecimiento sincero por Su bondad. En primer lugar, estaba el diezmo: la décima parte del producto de la tierra, junto con la “décima parte de la vacada y del rebaño”, debía llegar a ser “cosa santa a Jehová” (Levítico 27:30-32). Mientras los israelitas obedecieron a Jehová, él los bendijo abundantemente. “Traigan todas las décimas partes al almacén, para que llegue a haber alimento en mi casa; y pruébenme, por favor, en cuanto a esto —ha dicho Jehová de los ejércitos—, a ver si no les abro las compuertas de los cielos y realmente vacío sobre ustedes una bendición hasta que no haya más carencia.” (Malaquías 3:10.)

w08 15/12 pág. 30 ¿Recuerda usted?
¿Qué pueden aprender los superintendentes de la manera en que los pastores israelitas usaban el cayado?
El pastor guiaba al rebaño usando una vara larga y curva llamada cayado. Cuando metía o sacaba a las ovejas del corral, las hacía pasar “bajo el cayado” para poder contarlas y asegurarse de que ninguna faltara (Lev. 27:32). Así mismo, los pastores cristianos deben conocer bien el rebaño de Dios que está a su cargo y estar pendientes de lo que le sucede (15/11, página 9).

w08 15/11 pág. 9 párr. 7 Ayudemos a quienes se han apartado del rebaño
7. ¿Cuánta importancia le dan los ancianos a la labor de pastorear a las ovejas que están a su cargo?
7 Los pastores del antiguo Israel guiaban al rebaño usando una vara larga y curva llamada cayado. Cuando metían o sacaban a las ovejas del corral, las hacían pasar “bajo el cayado” para poder contarlas y asegurarse de que ninguna faltara (Lev. 27:32; Miq. 2:12; 7:14). De igual forma, los pastores cristianos deben conocer bien el rebaño de Dios que está a su cargo y estar pendientes de lo que le sucede (compárese con Proverbios 27:23). De ahí que a los cuerpos de ancianos les importe tanto la labor de pastoreo y tomen las medidas para ayudar a quienes se han alejado. Jehová mismo aseguró que él buscaría a sus ovejas y les daría el cuidado que necesitaban (Eze. 34:11). Por eso le complace ver que los ancianos lo imitan y ayudan a las ovejas descarriadas a regresar al rebaño.

CÓMO INFLUYE LEVÍTICO EN NUESTRA ADORACIÓN A DIOS

Hoy día, los testigos de Jehová no estamos bajo la Ley (Gálatas 3:23-25). Sin embargo, el contenido de Levítico puede influir en nuestra adoración porque nos ayuda a comprender el punto de vista de Jehová sobre diversos asuntos.
Cuando leamos la Biblia al prepararnos semanalmente para la Escuela del Ministerio Teocrático, no cabe duda de que nos impresionará el hecho de que nuestro Dios exige que sus siervos seamos santos. Este libro bíblico también puede motivarnos a dar lo mejor al Altísimo y a siempre mantenernos santos para su alabanza.

Referencias consultadas en: Watchtower Library 2013 CD‒ROM

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